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Misioneras

Evangelio del día

Por | evangelio

San Mateo 21, 28-32

Jesús dijo a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo:
«¿Qué les parece? Un hombre tenía dos hijos y, dirigiéndose al primero, le dijo: ‘Hijo, quiero que hoy vayas a trabajar a mi viña’.
El respondió: ‘No quiero’. Pero después se arrepintió y fue.
Dirigiéndose al segundo, le dijo lo mismo y este le respondió: ‘Voy, Señor’, pero no fue.
¿Cuál de los dos cumplió la voluntad de su padre?». «El primero», le respondieron. Jesús les dijo: «Les aseguro que los publicanos y las prostitutas llegan antes que ustedes al Reino de Dios.
En efecto, Juan vino a ustedes por el camino de la justicia y no creyeron en él; en cambio, los publicanos y las prostitutas creyeron en él. Pero ustedes, ni siquiera al ver este ejemplo, se han arrepentido ni han creído en él».

 

Evangelio del día

Por | evangelio

San Lucas 9, 43b-45

Mientras todos se admiraban por las cosas que hacía, Jesús dijo a sus discípulos:
«Escuchen bien esto que les digo: El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres».
Pero ellos no entendían estas palabras: su sentido les estaba velado de manera que no podían comprenderlas, y temían interrogar a Jesús acerca de esto.

 

Daily Gospel

Por | Gospel

Saint Luke 9, 43b-45

While they were all amazed at his every deed, he said to his disciples,
«Pay attention to what I am telling you. The Son of Man is to be handed over to men.»
But they did not understand this saying; its meaning was hidden from them so that they should not understand it, and they were afraid to ask him about this saying.

 

Daily Gospel

Por | Gospel

Saint Luke 9, 18-22

Once when Jesus was praying in solitude, and the disciples were with him, he asked them, «Who do the crowds say that I am?»
They said in reply, «John the Baptist; others, Elijah; still others, ‘One of the ancient prophets has arisen.'»
Then he said to them, «But who do you say that I am?» Peter said in reply, «The Messiah of God.»
He rebuked them and directed them not to tell this to anyone.
He said, «The Son of Man must suffer greatly and be rejected by the elders, the chief priests, and the scribes, and be killed and on the third day be raised.»

 

Evangelio del día

Por | evangelio

San Lucas 9, 18-22

Un día en que Jesús oraba a solas y sus discípulos estaban con él, les preguntó: «¿Quién dice la gente que soy yo?».
Ellos le respondieron: «Unos dicen que eres Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, alguno de los antiguos profetas que ha resucitado».
«Pero ustedes, les preguntó, ¿quién dicen que soy yo?». Pedro, tomando la palabra, respondió: «Tú eres el Mesías de Dios».
Y él les ordenó terminantemente que no lo dijeran a nadie.
«El Hijo del hombre, les dijo, debe sufrir mucho, ser rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, ser condenado a muerte y resucitar al tercer día».

 

Daily Gospel

Por | Gospel

Saint Luke 9, 7-9

Herod the tetrarch heard about all that was happening, and he was greatly perplexed because some were saying, «John has been raised from the dead» ;
others were saying, «Elijah has appeared»; still others, «One of the ancient prophets has arisen.»
But Herod said, «John I beheaded. Who then is this about whom I hear such things?» And he kept trying to see him.

 

 

Evangelio del día

Por | evangelio

San Lucas 9, 7-9

El tetrarca Herodes se enteró de todo lo que pasaba, y estaba muy desconcertado porque algunos decían: «Es Juan, que ha resucitado».
Otros decían: «Es Elías, que se ha aparecido», y otros: «Es uno de los antiguos profetas que ha resucitado».
Pero Herodes decía: «A Juan lo hice decapitar. Entonces, ¿quién es este del que oigo decir semejantes cosas?». Y trataba de verlo.

 

Daily Gospel

Por | Gospel

Saint Luke 9, 1-6

Jesús convocó a los Doce y les dio poder y autoridad para expulsar a toda clase de demonios y para curar las enfermedades.
Y los envió a proclamar el Reino de Dios y a sanar a los enfermos,
diciéndoles: «No lleven nada para el camino, ni bastón, ni alforja, ni pan, ni dinero, ni tampoco dos túnicas cada uno.
Permanezcan en la casa donde se alojen, hasta el momento de partir.
Si no los reciben, al salir de esa ciudad sacudan hasta el polvo de sus pies, en testimonio contra ellos».
Fueron entonces de pueblo en pueblo, anunciando la Buena Noticia y curando enfermos en todas partes.