Mes de mayo, mes de María. Mes de mayo, la época del resurgir de la vida, es un tiempo propicio para acercarnos y ofrecer homenaje a la Madre de la VIDA. En muchas culturas esta cariñosa veneración se manifiesta en una tradición muy enraízada en las familias de ofrecer cada día una flor y una oración sencilla a la Virgen. Redescubramos la belleza de esta devoción. La ofrecemos una guirnalda hecha de oración y reflexión sobre sus valores, su maternidad, su fidelidad. Acudamos a ella como una niña hace a su madre. Nos enseña cómo vivir nuestro compromiso con Jesús. Sor Mª Asunción González, O.P.